Para Mary J. Blige, cantante de profesión, fue el año 2017 uno de los más turbulentos y dolorosos de su vida. De hecho, el verano pasado, confirmaba su separación con el productor Martin “Kendu” Isaacs. Su matrimonio termina luego de 14 años de convivencia. La cantante sinceraba su gran decepción y sufrimiento; lo que pasó al estar con un hombre «al que no conocía en absoluto». Dicho comentario en clara alusión a las infidelidades de las que fue objeto por parte de su esposo.
Luego de dar a conocer la noticia, la propia Bigle dijo que daría todas sus fuerzas para que semejante desengaño no le permitiera quebrar su espíritu. En este sentido, quiso depositar toda su frustración y tristeza en su nuevo éxito musical. Pero además, concentrarse en delante de retomar la carrera interpretativa que había dejado pausada.
Mary J. Blige supera la tristeza
Con el tiempo la cantante ha demostrado ser una mujer fuerte; superado las adversidades a las que ha tenido que enfrentarse y con ello una segunda oportunidad para sentar las bases en el terreno profesional. De hecho, ya lo ha demostrado en las recientes nominaciones que ha recibido en galas tan importantes; tales como los Globos de Oro o las de de los premios del Sindicato de Actores.
La cantante con orgullo dijo al llegar a la última gala mencionada:
«He aprendido en los últimos meses que soy mucho más fuerte de lo que jamás hubiera imaginado, porque ahora mismo estoy viviendo todo un infierno [en referencia a su proceso de divorcio, que todavía está pendiente de un acuerdo entre las dos partes], pero al menos me contento con estar viviendo. No soy una persona a la que le guste recrearse en sus problemas, de hecho solo pienso en todo lo positivo que está por venir. Soy más fuerte y sabia que nunca».
Mary no disimuló su entusiasmo, debido a que el público se ha referido a ella por su faceta de intérprete, sobre todo por su papel de Florence Jackson en “Mudbound”.