Brooke Shields fue una de las actrices infantiles y juveniles más importantes de la década de los setenta y ochenta. A pesar de que todo en torno a su vida parecía ir muy bien; con el tiempo fue revelando que no todo lo que brilla es oro y la fama puede tener precios bastante altos.
Recientemente la actriz que actualmente tiene 53 años confesó que durante los últimos años de su infancia y su juventud su madre la llamaba gorda; por lo cual generó un fuerte problema de inseguridad en torno a su físico.
La madre de Brooke le causó graves inseguridades
La actriz afirma que durante su juventud era muy normal que su madre estuviera ebria; era en esos momentos cuando más la atacaba haciendo referencia a su trasero con adjetivos descalificativos.
Teri Shields murió en 2012 luego de una larga lucha contra el alcoholismo. Ella causó un grave problema de inseguridad en su hija con respecto a su cuerpo; ya que ella creció pensando que tenía un trasero gigante. Siempre se sintió incómoda con respecto a su peso y su estado físico.
Cuando tenía 15 años su madre que también fungía como manager; la inició en el mundo del modelaje de los trajes de baño. Brooke asegura que es una industria donde se reciben muchos comentarios negativos e hirientes y sumados a los que recibía por parte de Teri; esos años vivió momentos verdaderamente difíciles que la marcaron para siempre y fue difícil dejarlos atrás.
Actualmente dice que se siente mucho más orgullosa y segura de su físico; esto en parte gracias a su esposo Chris Henchy que le ayudó a mejorar su autoestima a través de sus detalles y la celebración que siempre ha hecho hacia su femineidad; pero sobre todo sobre su cuerpo.
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